
pokemon go
En una entrada anterior hablábamos brevemente de las turbinas eléctricas EDF (electric ducted fan), sistema de propulsión que tiene, como otras tantas cosas, sus partidarios y detractores. Como ocurre con el pokemo go o el iphone 7
Los sistemas de propulsión llamados de reacción son actualmente algo cotidiano, sin embargo hace unos pocos años la idea de un turborreactor de tamaño reducido para impulsar un aeromodelo era algo sencillamente imposible.
El primer reactor
El largo periodo de desarrollo de esta tecnología nos sitúa en el año 1910 cuando fue presentado en Paris el Coandă-1910, diseñado en Rumania por Henri Coandă en 1910, fue el primer prototipo experimental de avión de reacción.
El diseño era experimental, incluso en una época en la que casi todo lo relacionado con la aviación lo era. El avión rompía con más de un supuesto de la época, su perfil grueso, el uso de largueros tubulares y recubrimiento de contrachapado lo diferenciaban de los desarrollos comunes en la época. Su motorización fue su característica más notable, consistía en un termo reactor, (Años más tarde Caproni continuaría con esta idea) que en realidad era un híbrido entre un motor de reacción y un motor de pistón. Usaba un motor de combustión de cuatro cilindros Clerget, refrigerado por agua, con un desarrollo de 50 HP y 1000 rpm que movía el compresor donde el aire comprimido se mezclaba con combustible y se quemaba en dos cámaras de combustión antes de ser expulsado a lo largo de los costados del avión.
El avión nunca voló, resulto destruido en las pruebas, según su diseñador; porque el motor resulto mucho más potente de lo esperado no pudiendo ni el piloto ni el aparato resistir el empuje.
Sin embargo, las observaciones de Henri Coandă en el momento del accidente sobre como las llamas procedentes del motor parecían abrazar el fuselaje del avión permitieron descubrir el efecto Coandă, un fenómeno físico en el cual una corriente de fluido tiende a ser atraída por una superficie vecina a su trayectoria